Este año he creado una herramienta que se ha vuelto esencial en mi día a día: la agenda consciente.
Pero no es una agenda cualquiera, una agenda para reconectar contigo y con tu ritmo real.
Es una agenda sin fechas preestablecidas, que puedes empezar en cualquier momento del año, y que está pensada para ayudarte a organizarte con más conciencia, conectar contigo y sostener un ritmo realista, sin la presión de las autoexigencias que tantas veces nos desconectan de nuestras verdaderas necesidades.
Un pequeño ritual diario
Cada mañana, dedicar unos minutos a escribir en mi agenda se ha convertido en un ritual que me centra.
Me ayuda a poner el foco, a recordar lo que realmente importa y a no perderme en distracciones ni en listas interminables.
Hay algo casi mágico en el momento de tomar el boli y escribir las prioridades del día. Y esa sensación de tachar tareas cumplidas —ese pequeño “chute dopamínico”— me da motivación y una sensación real de avance.
Un compromiso contigo misma
Más allá de la organización, hay algo más profundo que ocurre cada vez que escribo:
me estoy enviando un mensaje a mí misma.
Un “estoy aquí para ti, me comprometo contigo”.
Con el tiempo, ese gesto cotidiano fortalece la confianza interna.
Porque cuando prometemos mucho y no cumplimos, sin darnos cuenta, reforzamos la idea de que no podemos fiarnos de nosotras mismas. Esta práctica me ha ayudado a reconstruir esa confianza desde lo pequeño y lo real.
Aprender a ajustar expectativas
Otro gran aprendizaje ha sido ajustar mis planes al día real, no al ideal.
A veces llenamos las páginas con tareas imposibles y terminamos frustradas.
Esta agenda me ha enseñado a priorizar con intención, a aceptar que no hay que hacerlo todo, pero sí hacer lo que realmente importa.
Cómo está organizada la agenda
Cada página tiene tres espacios muy sencillos:
- Actividades programadas, como citas, reuniones o clases.
- Lista de tareas que me gustaría hacer.
- Tres prioridades absolutas —solo tres—, esas que sí o sí quiero haber cumplido al final del día.
Además, cada jornada incluye un pequeño ejercicio o reflexión diaria inspirada en la Comunicación No Violenta. Puede ser una pregunta, una frase o una idea para tener presente. Son pequeñas invitaciones a cuidar cómo nos hablamos, cómo comunicamos y cómo nos relacionamos.
Una herramienta para compartir
Algo muy especial ha sido usar esta agenda en los grupos de madres y padres con los que nos reunimos cada mes.
En cada encuentro, alguien abría una página al azar y leía la reflexión del día.
Ese gesto sencillo nos ayudaba a conectar, compartir y abrir conversaciones profundas. Una forma preciosa de empezar nuestras sesiones con presencia y sentido.
Cierro con una invitación
Creé esta agenda desde una necesidad personal de estructura, flexibilidad y autocuidado.
Y me hace muchísima ilusión compartirla contigo.
Si te resuena lo que te cuento, te invito a probarla y hacerla tuya, a tu ritmo, a tu manera.
Quizás también se convierta en ese pequeño espacio diario donde volver a ti.
A TRAVÉS DE LA SUSCRIPCIÓN RECIBIRÁS GRATIS UN PDF CON LA GUÍA DE CNV
Además, recibirás el calendario de las conferencias/formaciones que impartiré, contenidos de valor e información sobre los proyectos que vaya creando.
Responsable de tratamiento: Nerea Mendizabal Etxeberri, con dirección en: Uztapide 3-4 izq. – 20740 Zestoa (Guipuzcoa) | Finalidad: Atender a su solicitud. Enviarle información | Duración del tratamiento: plazos legalmente obligatorios (1 año) | Autoridad de control: Agencia Española de Protección de Datos, www.aepd.es

